La primera vez que subí el Iztaccíhuatl fue una mezcla de emociones: emoción, nervios, adrenalina… y frío, mucho frío. Una experiencia increíble, pero también una en la que juré que no volvería a repetir… (spoiler: lo hice).
Ya había subido el Nevado de Colima en diciembre y, como todo buen inicio de año, me puse la meta de subir dos montañas en 2021. La primera fue el Iztaccíhuatl. Según yo, iba preparada: una amiga me explicó la ruta, llevé mis snacks y, como buena mexicana, hice mi mochila la noche anterior.
¿El problema? Cometí errores de principiante que hicieron la travesía mucho más difícil de lo que debía ser.
Errores que no volveré a cometer (y tú tampoco deberías)
🔹 Guantes… pero solo izquierdos 🤦♀️
Así es. Empaqué dos guantes izquierdos y terminé con una mano congelada en temperaturas de -7°C a -10°C. No me di cuenta hasta que ya estábamos en la montaña.
🔹 Bastones rebeldes
Los bastones que llevé se deslizaban y no me llegaban a la altura correcta. Mientras caminaba, se hacían grandes y pequeños, lo que los hizo completamente inútiles en los tramos más técnicos.
🔹 Mochila sin soporte adecuado
La mochila que llevé, no tenía correas ajustables ni amarres en la cintura y el pecho, así que toda la carga recayó en mis hombros durante 13 horas de caminata. Nunca subestimes la importancia de una mochila ergonómica como la Teton Oasis, que distribuye mejor el peso y te da estabilidad.
🔹 Olvidar los lentes de sol 🕶️
No se me ocurrió que los necesitaría, pero a esa altura, la nieve y el reflejo del sol pueden ser un problema real. Por suerte, alguien me prestó unos, porque sin ellos, no hubiera podido continuar.
Lo Que Aprendí en el Camino
A pesar de todo lo malo, esa montaña me enseñó algo más grande que cualquier error: la gente en la montaña es buena y te ayuda.
Uno de los compañeros me prestó sus guantes un rato para calentarme las manos. Más adelante, en el glaciar, grité a mi guía que tenía miedo, pero ya estaba abajo. Un montañista que había escuchado subió de nuevo para acompañarme y guiarme en el descenso. Cuando le pregunté por qué lo hizo, su respuesta me marcó:
"Una vez yo también tuve miedo, y alguien me ayudó."
Ahí fue cuando la montaña me ganó. Porque al final, todos vamos por un mismo objetivo y nos acompañamos en el camino.

💡 TETON TIP: Prepara tu equipo con anticipación y pruébalo antes de salir. Un pequeño error puede hacer la diferencia entre una buena experiencia y un mal rato.
Consejos que me hubiera gustado saber antes
✔️ Revisa que llevas un guante derecho y uno izquierdo
✔️ No olvides tus lentes de sol con filtro 3 o 4
✔️ Usa bastones de calidad, que no se deslicen
✔️ Invierte en una mochila con correas ajustables y soporte lumbar
✔️ Recuerda que la gente en la montaña es increíble, pero tu preparación depende de ti
Espero que estos consejos te sirvan y que, cuando subas el Iztaccíhuatl , la pases mejor que yo en mi primera vez.
¡Nos vemos en la montaña!